Luna

🌊 Perspectiva científica: La luna y el agua que llevamos dentro

Alrededor del 70% de nuestro cuerpo está formado por agua.
Si la atracción gravitatoria de la Luna mueve los océanos, es natural suponer que también afecta a los humanos, aunque de forma más sutil.

Muchos estudios han demostrado que alrededor de la luna llena:

• Las fases del sueño son más cortas e inquietas,

• Las hormonas (por ejemplo, la melatonina) se liberan de forma diferente,

• La percepción emocional puede ser más intensa,

• .

Médicos y psicólogos afirman también que algunas personas reaccionan de forma más sensible alrededor de la luna llena, sueñan más o se sienten "cargadas" por dentro.

Estos efectos no son mágicos, sino que forman parte de un sistema de resonancia natural: el ser humano como parte de un ritmo mayor.

Conclusión: La luna tiene un efecto, no sólo en las mareas, sino en nuestro ser más íntimo.
Nos recuerda el ritmo, el cambio y el conocimiento silencioso de la vida.
Si aprendemos a movernos con sus fases en lugar de contra ellas,
encontramos un equilibrio natural entre el hacer y el ser, entre la cabeza y el alma.

"La luna nos muestra que la luz y la sombra van juntas -
y que ambas forman parte de nuestro propio crecimiento".